En algún momento tuve la posibilidad de visitar uno de los, posiblemente, jardines privados menos conocidos de la zona donde vivo. Mientras disfrutaba del entorno apareció ella y con ese paso seguro y firme del que camina por su jardín, se perdió entre los setos y los parterres.
No se si pudiste esperar que la damisela anduviese tres o cuatro pasos mas para así hacerla algo mas intima… evitando el arbusto del primer plano y así seria, en mi opinión, una foto mas limpia y evocadora. Aun así, es un buen trabajo.
Saludos.
Hola. Lo primero agradecer tu comentario.
La damisela se percató de que algo pasaba a sus espaldas, se giró, miró al fotógrafo ( hay testimonio gráfico) y se esfumó rauda y veloz por el caminito de la izquierda…
Ahora que lo pienso igual es mejor la historia que la foto.
Miraré si es posible restar protagonismo a ese seto que me comentas.
Salud!