Uno espera esta estación tan preciada de todo fotógrafo por sus luces y colores de otoño que te da la vegetación en su periodo de oxidación del ramaje y de hojas que van cayendo lentamente día a día al suelo cubriendo con una manta ocre despojando al quien le dio la vida de su vestimenta, al andar por ellas un ruidoso crujir donde aprecias la sequedad de ellas, todo esto es pasajero, efímero, hasta que llega el invierno.
Un lujo de colores. Paisaje muy bonito y, como en la mayoría de las fotos que he visto tuyas, un procesado muy cuidado y acertado.
Buena foto.
Un saludo.
La foto resulta bonita porque ademas tiene un buen encuadre y buena nitidez (algruien tendría que quitar ese tronco del medio), pero los colores no me parecen muy reales. El suelo se ve demasiado magenta y las hojas de las hayas están demasiado encendidas para mi gusto. Pero el resultado llama la atención.
Saludos.
Mira que he visto fotografias de este lugar y no me canso de verlas, me
parece un lugar precioso.
Tu fotografia está estupenda, con unos colores preciosos.
Un saludo