En una visita relámpago a tierras andaluzas, estuve callejeando por Arcos de la Frontera, un pueblo donde no encontré ninguna de sus calles llanas, todo eran cuestas, solo la plaza donde está la basílica barroca de Santa María.
Al abrir la foto y sin darme cuenta quien era el autor habría jurado que esa foto sería de Emilio, con eso creo que te lo he dicho todo, un procesado delicioso Pedro, enhorabuena.