No solo los vesiculosos de tracción mecánica suben la N-621, hasta la cima de Puerto San Glorío, ver como el ganado vacuno, también transita por el camino de buenos pastos.
Escena perfectamente fotografiada, que me ha tocado sufrir en más de una ocasión. Lo peor es cuando los animalitos se refugian en un túnel y se niegan a abandonar su acogedor refugio del sol estival. ¡Ay, entonces, cuando toca hacer de pastor!
Magnífico punto de vista, composición y reflejo del entorno.
Me gusta. Esos verdes… huuum. A mi gusto y visión, habría disimulado un poco mas el viñeteo (que comparto). Hay como un brillo en la baliza del primer plano a la izquierda que queda raro y desmerece.
Me gusta mucho cómo se contraponen la velocidad que imprime la carretera y la lentitud de las vacas cuando la mirada se topa con ellas, descubrir el coche algo más tarde ya la redondea. Por lo demás, estoy de acuerdo con los comentarios de @jofial.