Pensaba mientras realizaba la fotografía en la obsolescencia programada, en esa obra en papel que durará decenas, acaso cientos de años, mientras sea tratada con mimo, mientras que el cacharro electrónico no servirá a su fin más que un par o tres años, como mucho. Lo mismo pasará con todos nuestros jpg, productos de horas y horas de procesado, se perderán en cualquier momento, ya sea por un accidente doméstico con nuestros discos duros o por el paso del tiempo, quedarán olvidados en alguna memoria que más pronto que tarde será inservible o acabará en la basura. Hoy estoy positivo
El señor en analógico y los hijos en digital.
Me gustan el cuadro e incluso las respectivas poses de los protagonistas.
Con respecto a la edición, quizá potenciar los medios tonos para dar más fuerza a esas sombras que, a mi juicio, están levantadas en exceso.
Saludos.
Pues si, algún día más pronto que tarde, sobre todo para los que ya tenemos tres edades, todo nuestro trabajo quedará muerto en cualquier dispositivo olvidado en un cajón y de ahí al reciclaje. Pero bueno…mientras tanto disfrutemos de fotos como esta que nos presentas, muy buena.