La flor que se ve en la puerta, se llama eguzki lore (flor del sol), se usa para espantar a las brujas que no pueden pasear bajo la luz de este astro.
También conocidas como Carlinas. He visto muchas todavía; también será que pinchan… la delicada piel de las brujitas. Por cierto, he oído que una brújula es una señora encima de una escóbula…
Pues la mía es una brupiradora. Menos mal que no lee estos mensajes.
A destacar contraste y texturas, es lo que suele dar una luz algo durilla.
Hola,
Que bien puesto que está todo. Una imagen de lo más agradable.
Siento deciros que esto no funciona. Yo tengo puestas siete en la puerta del despacho y las brujas siguen entrando como perro por su casa.
Saludos.
Albert .
Bonita toma, jugando con los colores, la planta y un nombre euskara de rancio abolengo.
Aquí en el Pirineo Catalán se dice/se rumorea que las brujas se quedaban encandiladas contando los pinchos desde el exterior hasta el interior de la flor y como hay tantos les daba el amanacer… entonces a correr a sus escondrijos o perdían sus poderes.
Saludos
Nota: no funciona en las oficinas y centros de trabajo… Todo son fluorescentes…
Pues ya me dirás donde puedo hacerme con una… por mi suegra, ya sabes…
Muy chula la foto… abrazos…
Está prohibido cogerlas. Están en peligro de extinción. Es que aquí también tenemos suegras.
Que curioso… no sabía de su existencia.
Te ha quedado bastante vistosa
Un saludo!