Me ha dado una ventolera interpretativa. Yo soy de la opinión de que los veleros y barcos en general es mejor fotografiarlos de costado. Pero a mi también me gustan de frente. En este caso, con ese “corredor” de veleros deportivos como si le estuvieran haciendo un homenaje. Ya diréis.
Uy el holandés errante, nunca atracaba en ningún puerto, y como lo saludaras le acompañabas en su viaje. Este debe de ser de la versión de Bob esponja.
Bien la edición, dándole ese aire de neblina, que acompañaba a dicho barco fantasmagórico.
Abrazos.