Un retrato que pude hacerle a un peregrino este fin de semana. La verdad es que da gusto encontrar a gente así, apunté, hice la foto…y después ni un mal gesto, algo que me invitó a charlar con él. Tres o cuatro años llevaba en el camino con sus acompañantes, dos perros, a veces siento envidia de la gente que vive así, en apariencia de manera despreocupada, sin esperar mucho del día siguiente, “viéndolas venir”. Mientras tanto, los demás, pagando hipotecas, alquileres, corriendo de un lado para otro…
Gracias por comentar. Ya sabéis, con un 85mm (equivalente FF) y captando a la gente por la calle…te posicionas en un punto y haces la foto, si te mueves hacia delante o detrás, probablemente has perdido la toma.