He comentado en varias ocasiones las bondades y limitaciones del tele RF800mm F11 de Canon, en mis rutas es casi un fijo a pesar de lo que ocupa en la mochila pero por su peso casi no se nota que lo llevas, también es cierto que en según que tipo de fotos sino vas con una planificación hecha se te puede quedar larga esa focal dependiendo del punto de disparo y sin duda lo que mas puede penalizar en este objetivo es ese f11 sobre todo en condiciones con poca luz. Esto último aunque a veces puede llegar a ser un coñazo es a la vez un juego de habilidad que llega a ser un divertimento, buscando la combinación justa de los parámetros de la cámara donde todo gira entorno a esa apertura única y la luz del momento, como en el caso de esta foto que hice cerca de la casa de mi Madre en el invierno de 2023, aunque solo faltaba una hora para el amanecer ni apurando la velocidad a 1/4s podía subir el ISO a mas de 640 sin quemar esa preciosa Luna llena… finalmente decides cazar el momento sub-expuesto (ISO 500) y luego levantar un poco la iluminación y las sombras en edición, pero solo lo justo que quien me conoce sabe que eso intento tocarlo lo mínimo posible, pero son de esos días que a parte de disfrutar del impagable espectáculo y de pasártelo bien “jugando” con la cámara te acabas llevando ese recuerdo en un archivo que vuelves a disfrutar cada vez que lo ves. Hoy lo comparto por aquí y en este caso va por el compañero @Antoniopalmeras que también ha tenido el honor de disfrutar de estas montañas gastando algunas botas por sus senderos. Buen fin de semana para tod@s
Formato 16:9
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Un saludo.